Cada vez que realizamos una cristalización, obtenemos un volumen considerable de aguas madres (disoluciones saturadas). Nos planteamos utilizarlas para obtener nuevos cristales, para ello:
- Tomamos un volumen de la disolución y la calentamos en recipiente abierto para que se evapore parte del disolvente.
- Cuando observamos que se ha reducido el volumen, vamos tomando gotas y las colocamos sobre un portaobjetos para observarla al microscopio.
- Cuando observamos que se forman cristales dejamos de calentar y dejamos la disolución en reposo.
De esta forma hemos obtenido algunos cristales:
Son agrupaciones de prismas pequeños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario